lunes, marzo 24, 2008

Cántame

Cántame versos lentos al oído
Con tu voz romántica y verde.
Enamórame, como la vista
(Desde los rascacielos de Nueva York)
(Desde los apartamentos en Santurce)
Enamórame desde algún punto equidistante
En esta isla pequeña y perdida.

Cántame versos lentos al oído
Con tu voz ronca entre montañas
Entre ríos de brea y cemento.
Dime verdades ocultas en vitrinas
Dime razones enteras, densas
Como tratados de Rousseau.

Cántame versos lentos al oído
Con tu boca redonda como el mundo,
Redonda como tus nalgas, como tus ojos.
Muérdeme con beso vampirézco
Entre selvas edificadas, entre castillos post-modernos

Cántame versos lentos al oído
Con tu voz de siempre,
Pero no me arranques las ideas
De seguir escuchándote y pensándote
Desde esta ciudad, letrada, silenciada y maldita.

1 comentario:

Ana María Fuster Lavin dijo...

Várgate diría yo, que este poeta es un cantor apasionado, qué ritmo!!! desde una enladrillada torre postmoderna se arroja no al vacío sino al todo de su piel, de la piel de su espejo, de la voz de la otredad a la que convoca, busca ese dueto acompasado, potente, mítico como urbano desde la condena eterna en el beso de sangre que es la vida… hermanito…. Cuando tengas el manuscrito completo del poemario, entrégamelo para leerlo como un conjunto!!!!